La Reflexión N.º 323. Se titula: Los que hablan demasiado y hacen poco.




La Reflexión N.º 323. Se titula: Los que hablan demasiado y hacen poco.
Estimado lector: Cuantas veces vemos y escuchamos a personas que les gusta hablar en demasía, proyectando planes a futuro y prometiendo esto o aquello, y vemos que pasado el tiempo no cumplen con lo que proyectaron y prometieron.
En la Santa Biblia , que es la palabra de Dios, tenemos claramente expuesta la definición acertada de este tipo de personas, Dice :” Eclesiastés 11:4 El que al viento observa, no sembrará, y el que mira a las nubes, no segará.”
Amable lector: este tipo de personas, en su mente, es seguro que les gustaría, poder ver sus planes realizados, mas son personas no prácticas, les falta: determinar. Esto no solo es para grandes planes, sino que también acontece en la vida cotidiana. Pondremos un ejemplo simple: Nos imaginamos estar en una casa que tiene una pared con humedad y su pintura estropeada. El hombre promete a la mujer que la pintará. De ves en cuando vuelve a prometer, y no lo hace. Nunca compró la pintura y elementos para poder hacer el trabajo, y el tiempo pasa, y pasa , y no se hace. La intención de él es hacer, pero nunca hace. No hay nada, ningún elemento.
Para poder hacer algo, generalmente tiene que haber algo, y nosotros somos los responsables de que haya algo. A continuación transcribiré un ejemplo de que, para poder concretar algo, debe haber también algo, y esta porción bíblica, se refiere a cuando el Señor Jesucristo multiplicó cinco panes y dos peces, para alimentar a cinco mil personas, pues al venir para escucharlo a un lugar desierto, y era ya hora muy avanzada, no los quiso despedir sin que comieran, por su misericordia y amor.
“ San Marcos 6:30-44. Alimentación de los cinco mil./// 30 Entonces los apóstoles se juntaron con Jesús, y le contaron todo lo que habían hecho, y lo que habían enseñado./// 31 El les dijo: venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco. Porque eran muchos los que iban y venían, de manera que ni aun tenían tiempo para comer./// 32 Y se fueron solos en una barca a un lugar desierto./// 33 Pero muchos los vieron ir, y le reconocieron; y muchos fueron allá a pié desde las ciudades, y llegaron antes que ellos, y se juntaron a él./// 34 Y salió Jesús y vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor, y comenzó a enseñarles muchas coas./// 35 Cuando ya era muy avanzada la noche, sus discípulos se acercaron a él, diciendo: El lugar es desierto, y la hora ya muy avanzada./// 36 Despídelos para que vayan a los campos y aldeas de alrededor, y compren pan, pues no tienen qué comer./// 37 Respondiendo él, les dijo: Dadles vosotros de comer. Ellos le dijeron: ¿ Que vayamos y compremos pan por doscientos denarios, y les demos de comer?/// 38 El les dijo: ¿ Cuántos panes tenéis? Id y vedlo. Y al saberlo, dijeron: Cinco, y dos peces./// 39 Y les mandó que hiciesen recostar a todos por grupos sobre la hierba verde./// 40 Y se recostaron por grupos, de ciento en ciento, y de cincuenta en cincuenta.
41 Entonces tomó los cinco panes y los dos peces, y levantó los ojos al cielo. Bendijo, y partió los panes, y dio a sus discípulos para que los pusiesen delante, y repartió los dos peces entre todos.
42 Y comieron todos, y se saciaron./// 43 Y recogieron de los pedazos doce cestas llenas, y de lo que sobró de los peces./// 44 Y los que comieron eran cinco mil hombres.”
Apreciado lector: en esta hermosa enseñanza debemos tener presente: siempre tener algo, y ese algo será incentivo para realizar, y por supuesto ganas de hacer.
En lo espiritual es algo similar, y ese algo será lo que determine la victoria que es: la fe en nuestro Señor Jesucristo. ¿ Y cómo lograrlo? La única manera es aceptar al Señor en su corazón, con arrepentimiento sincero de todos sus pecados, abrazando el sacrificio de la cruz del Calvario; busque un templo evangélico donde se mueva el Espíritu Santo, y practiquen liberación de espíritus malignos, consiga o compre la Santa Biblia, recomiendo la Reina Valera, edición 1960, y pronto verá resultados positivos para su vida espiritual y física. Para finalizar le dejo un versículo bíblico para meditar: “ San Marcos 9:23 Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.”

Qu el Señor lo bendiga abundantemente, un amigo en el Señor. Si desea saber más deje su mensaje al 1134012867