La Reflexión N.º 245. Se titula: ¿ Qué efecto causa en el cristiano La Santa Cena del Señor? Primera parte.





La Reflexión N.º 245. Se titula: ¿ Qué efecto causa en el cristiano La Santa Cena del Señor? Primera parte.
Estimado lector: en primer lugar es: mandato de nuestro Señor Jesucristo; para que todos los que creemos en Él firmemente, ejecutemos su santa voluntad, para que seamos visitados por su Santo Espíritu. De esta manera seremos fortalecidos en nuestro espíritu, y también serán renovadas nuestras fuerzas físicas, pues sin lugar a dudas viene sobre nosotros el Espíritu Santo.
¡ Cuan misericordioso y amoroso es nuestro Señor! ¡ Bendito y alabado sea su santo nombre por los siglos de los siglos, amén, amén, amén y gracias a Dios!
Es el recordatorio de que al derramar su sangre santísima en el Calvario, entregándose a muerte de cruz, en ese sublime sacrificio, nuestro pecados son perdonados, quedando restablecida la unión que estaba cortada con Dios Padre Todopoderoso y Eterno.
Nuestro Señor utilizó dos elementos visibles y palpables: el pan y el vino. El pan representa su santo cuerpo, y el vino representa su santa sangre. Al participar de ellos es porque estamos completamente de acuerdo con Él, y con todo lo que dejó establecido. Nos acoplamos espiritualmente a Él, formando una unión indestructible. En el momento de la participación y al pedir que Él consagre el pan y el vino inmediatamente su Espíritu Santo viene a nosotros, y nos conmueve y quedamos muy bien, renovados, gozosos, sabiendo que somos obedientes a Él, y que tendremos la vida eterna.
La instituyó en la Pascua y fue sacrificado como un cordero sin mancha.
Amable lector: ahora transcribiré del Evangelio de San Marcos: La institución de la Cena del Señor, para que vayamos leyendo, despacio, y podamos comprender la profundidad de esta hermosa ceremonia, de la participamos todos los que amamos a nuestro Señor Jesucristo.
“ San Marcos 14: 12-25 Institución de la Cena del Señor
12 En el primer día de la fiesta de los panes sin levadura, cuando sacrificaban el cordero de la pascua, sus discípulos le dijeron: ¿ Dónde quieres que vayamos a preparar para que comas la pascua?
13 Y envió a dos de sus discípulos, y les dijo: Id a la ciudad, y os saldrá al encuentro un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidle,
14 y donde entrare, decid al señor de la casa: El Maestro dice: ¿ Dónde está el aposento donde he de comer la pascua con mis discípulos?
15 Y el os mostrará un gran aposento alto ya dispuesto; preparad para nosotros allí.
16 Fueron sus discípulos y entraron en la ciudad, y hallaron como les había dicho; y prepararon la pascua.
17 Y cuando llegó la noche, vino él con los doce.
18 Y cuando se sentaron a la mesa; mientras comían, dijo Jesús: De cierto os digo que uno de vosotros, que come conmigo, me va a entregar.
19 Entonces ellos comenzaron a entristecerse, y a decirle uno, por uno: ¿ Seré yo ? Y el otro: ¿ Seré yo ?
20 Él respondiendo, les dijo: Es uno de los doce, el que moja conmigo en el plato.
21 Ala verdad el Hijo del Hombre va, según está escrito de él, mas ¡ ay de aquel hombre por quien el Hijo del Hombre es entregado! Bueno le fuera a este hombre no haber nacido.”
Continuaremos en la Reflexión siguiente, o sea la N.º 246.