La Reflexión Nº
120. Se titula: La cosecha.
Amable lector:¿ Pensó alguna vez en la importancia que
encierra el significado de esta palabra? Usted con seguridad sabe que es algo
común y corriente ya que siempre la escuchamos. Ahora bien , en nuestro idioma,
que es muy rico en acepciones de las palabras, la cual tiene su raíz en Latín:
collecta: que significa recolección referente a frutos que se recogen de la
tierra como ser: trigo, cebada, uvas , aceitunas etc; también significa temporada
que se recogen los frutos y además conjunto de cosas no materiales como virtudes , vicios etc.
En esta última significación viene la gran importancia para
el ser humano, ya que las virtudes y los vicios son propios de nuestra raza.
Para que las virtudes sean genuinas, deberá haber aceptación
de la Cruz del
calvario, del Señor Jesucristo con arrepentimiento sincero de todos los pecados
y desobediencias.
La semilla , que es la palabra de Dios, de esta manera
germinará en el corazón del ser humano. La tierra, o sea el corazón, deberá ser
limpiado de todas las maldades y vicios, lo cual ciertamente lo puede hacer
nuestro Señor Jesucristo para que dé frutos genuinos y dignos de
arrepentimiento.
El Señor Jesús nos da el sentido y el porqué de la
importancia de la semilla más preciosa y valiosa que puede existir, que es la
palabra de Dios.
A continuación transcribiré versículos bíblicos para que
usted lea y reciba la palabra de Dios, si así lo desea y pueda dar frutos
espirituales, consecuencia de tener al Señor Jesucristo en su corazón.
“ San Marcos 4: 1-20. Parábola del sembrador.
1.Otra vez comenzó Jesús a enseñar junto al mar, y se reunió
alrededor de él mucha gente, tanto que entrando en una barca, se sentó en ella
en el mar; y toda la gente estaba en tierra junto al mar.
2. Y les enseñaba por parábolas muchas cosas, y les decía en
su doctrina:
3. Oíd: He aquí, el sembrador salió a sembrar;
4. y al sembrar, aconteció que una parte cayó junto al
camino, y vinieron las aves del cielo y la comieron.
5. Otra parte cayó en pedregales, donde no tenía mucha
tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra.
6. Pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se
secó.
7.Otra parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron y
la ahogaron, y no dio fruto.
8. Pero otra parte cayó en buena tierra, y dio fruto, pues
brotó y creció, y produjo a treinta, a sesenta, y a ciento por uno.
9. Entonces les dijo: el que tiene oídos para oír, oiga.
10. Cuando estuvo solo, los que estaban cerca de él con los
doce le preguntaron sobre la parábola.
11. Y les dijo: A vosotros os es dado saber el misterio del
reino de Dios; mas a los que están fuera, por parábolas todas las cosas;
12. para que viendo, vean y no perciban; y oyendo, oigan y
no entiendan; para que no se conviertan, y les sean perdonados los pecados.
13. Y les dijo: ¿ No sabéis esta parábola? ¿ Cómo, pues,
entenderéis todas las parábolas?
14.El sembrador es el que siembra la palabra.
15.Y estos son los de junto al camino; en quienes se siembra
la palabra, pero después que la oyen, en seguida viene Satanás, y quita la
palabra que se sembró en sus corazones.
16.Estos son asimismo los que fueron sembrados en
pedregales; los que cuando han oído la palabra, al momento la reciben con
gozo;
17. pero no tienen raíz en sí, sino que son de corta
duración, porque cuando viene la tribulación o la persecución por causa de la
palabra, luego tropiezan.
18. Estos son los que fueron sembrados entre espinos; los
que oyen la palabra,
19. pero los afanes de este siglo, y el engaño de las
riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace
infructuosa.
20.Y estos son los que fueron sembrados en buena tierra; los
que oyen la palabra y la reciben, y dan fruto a treinta, a sesenta, y a ciento
por uno”.
Estimado: El Señor Jesús ya habló a su corazón y depende de
usted aceptarlo o rechazarlo. Si lo acepta será un hijo de Dios, si lo rechaza
se perderá.
Para finalizar y para que medite le dejo:” Gálatas 6: 7-8.
7.No os engañéis; Dios no puede ser burlado; pues todo lo
que el hombre sembrare, esto también segará.
8.Porque el que siembra para su carne, , de la carne segará
corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida
eterna.
Que el Señor lo bendiga abundantemente. Un amigo en el
Señor.
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